Nadar es una actividad fantástica que te permite ejercitarte sin poner demasiada presión en tus articulaciones. Sin embargo, si no tienes una buena técnica de natación, es posible que no estés obteniendo todo el beneficio de tu esfuerzo en la piscina. A continuación, te presentamos algunos consejos para mejorar tu técnica de natación.
- Practica la respiración adecuada: Muchos nadadores novatos tienen dificultades con la respiración, lo que puede afectar la técnica. Una buena forma de practicar la respiración adecuada es hacer ejercicios de respiración en seco antes de entrar a la piscina. Cuando estés en el agua, asegúrate de exhalar completamente bajo el agua y luego inhalar una vez que tu cabeza esté de nuevo en la superficie.
- Mantén tu cuerpo en línea recta: Una buena técnica de natación implica mantener tu cuerpo en línea recta en el agua. Para hacer esto, asegúrate de que tu cabeza esté en línea con tu columna vertebral y que tus piernas estén completamente extendidas detrás de ti. Si tus piernas están dobladas, tu cuerpo formará una forma de “L” y la resistencia en el agua será mayor.
- Usa tus brazos de manera eficiente: Para nadar más rápido y con menos esfuerzo, debes usar tus brazos de manera eficiente. Asegúrate de que tus brazos entren en el agua a la altura de tus hombros y luego sigue un movimiento en forma de S debajo del agua. Este movimiento debe terminar cerca de tus muslos antes de sacar el brazo del agua para comenzar de nuevo.
- Practica los virajes: Si nadas en una piscina, los virajes pueden marcar una gran diferencia en tu tiempo. Practica tus virajes para asegurarte de que estás girando en el lugar adecuado y saliendo con la cantidad adecuada de impulso.
- Entrena con regularidad: La práctica hace al maestro, y esto es especialmente cierto para la natación. Para mejorar tu técnica, necesitas practicar regularmente. Intenta nadar varias veces por semana, incluso si solo tienes unos pocos minutos cada vez.
- Usa accesorios de natación: Algunos accesorios de natación pueden ser útiles para mejorar tu técnica, como las tablas de natación y las aletas. Las tablas de natación pueden ayudarte a concentrarte en tu técnica de brazada, mientras que las aletas pueden ayudarte a fortalecer tus piernas y mejorar tu posición en el agua.
- Pide ayuda: Si no estás seguro de cuál es tu técnica de natación, pídele a un entrenador o a un amigo que te observe y te dé algunos consejos. A veces, una pequeña corrección puede marcar una gran diferencia en tu técnica.
